A finales del pasado diciembre, el Instituto Nacional de Estadística (INE) dio a conocer el nuevo índice de referencia para la actualización las rentas a partir de 2025. Se trata de una especie de calculadora, que aplica una fórmula matemática para determinar el valor máximo al que los propietarios deberán ajustarse si quieren actualizar la renta que pagan sus inquilinos cuando cumplan un año de contrato.
La Ley de Vivienda, que entró en vigor en 2023, recogía la creación por parte del INE de un nuevo índice específico para la actualización anual de las rentas. Hasta la aprobación de esta norma, se hacía siempre conforme a las variaciones de los precios, aplicando el valor del Índice de Precios al Consumo (IPC).
Sin embargo, con el objetivo de mitigar los efectos de la inflación en los inquilinos, el Gobierno limitó la actualización de las rentas a un máximo del 2% en 2023 y del 3% en 2024, con el compromiso de que, a partir de este nuevo año, se crearía un instrumento específico para calcular el valor de las actualizaciones periódicamente.
Así, el nuevo Índice de Referencia de Arrendamientos de Vivienda (IRAV) tiene en cuenta elementos como la tasa de variación anual del IPC o la tasa de variación anual del IPC subyacente, así como una media de ambas, corregida con un coeficiente moderador. Así, el primer dato que se ha dado a conocer, correspondiente al mes de noviembre, es del 2,2%. La cifra se actualizará de forma mensual con los últimos datos disponibles.
De cualquier manera, es preciso señalar que este índice solo se aplicará a los contratos de arrendamiento firmados tras la entrada en vigor de la Ley de Vivienda, es decir, posteriores a mayo de 2023. Para todos los anteriores, se mantendrá vigente la actualización conforme a las variaciones del IPC, como se venía haciendo desde antes de la aprobación de esta norma.
La publicación de este índice resuelve una de las grandes incógnitas que planeaban sobre el mercado del alquiler en 2024. Pese a que la Ley de Vivienda no especificaba en qué fecha debía darse a conocer este instrumento, sí que obligaba a que se hiciera antes de que terminara 2024. Desde el 20 de diciembre, los propietarios ya disponen de esta referencia para conocer cuánto pueden actualizar las rentas que pagan sus inquilinos.
Sin embargo, pese a que disponer de este índice termina con la incertidumbre que existía en torno a este asunto, su publicación no ha satisfecho a todo el mundo. Desde Alquiler Seguro, consideramos que la fórmula empleada para su cálculo lo situará siempre por debajo de la inflación real, lo que puede perjudicar el poder adquisitivo de los propietarios de viviendas en alquiler.
El nuevo sistema no tiene en cuenta las variaciones de los precios, por lo que puede empeorar la situación general del alquiler en España, desincentivando aún más la oferta y redundando en más subidas de precios y más dificultades para que los jóvenes y las familias puedan acceder a una vivienda en nuestro país.